miércoles, 15 de marzo de 2023

'Tierra llana' de Francisco J. Castañón


Este poemario es un recorrido por el universo íntimo del autor y sus reflexiones sobre el devenir de la sociedad actual que tiene como significativo telón de fondo los paisajes de la meseta castellana. La llanura, con sus señalados desniveles, es aquí metáfora de nuestro cotidiano vivir, nunca exento de instantes álgidos o amargos. 
 
‘Tierra llana’ es un viaje poético por rincones inspiradores, pueblos, ciudades o entornos en los que la naturaleza es protagonista, donde los versos del poeta indagan en temas de hoy, como las crisis recurrentes, el deterioro medioambiental, el impacto de las tecnologías digitales, el empleo de las redes sociales, la España vaciada, antiguos oficios que intentan sobrevivir, etc. También en interrogantes que plantea el futuro inmediato o en claves que pueden aportar personajes, reales o ficticios, del pasado. 
 
De esta forma, los poemas de Francisco Castañón en ‘Tierra llana’ nos invitan a repensar el mundo, y apostar por el compromiso y la utopía.      

martes, 14 de marzo de 2023

lunes, 11 de marzo de 2019

Un poema 'In memoriam', 11 de marzo de 2004


Tiempo después de los atentados del 11 de Marzo de 2004 escribí estos versos. Transcurridos 15 años de aquellos trágicos sucesos los publico hoy aquí por vez primera en memoria de las víctimas del atentado terrorista más brutal que ha sufrido nuestro país.




Madrid, 11 de marzo de 2004

In memoriam


I - Los atentados o el aliento alanceado

Aún sin estrenar estaba la mañana,
cuando en hora punta
fue quebrada por el espanto
y la tragedia.
Entonces la monotonía complaciente
de ese día a día rutinario,
sucumbió aniquilada por la infamia,
por una crueldad severa
que transformó toda concordia
en angustia y desconsuelo.
De improviso, fue así como la cotidiana realidad
transmutó su piel en iniquidad irremisible.

II - Una ciudad en la consternación clavada

Llegó el siguiente día con un cielo
sembrado de nubes enlutadas,
cuyos tonos cenicientos daban cuenta
del trágico sentir que iba horadando
cada alma compasiva.

Surgió, sí, una mañana nueva,
colmada de un refrenado furor
que agrietaba la sangre casi inmóvil.

El futuro, aterradoramente,
sañudamente herido
por todos los adverbios crueles.

El desasosiego se hizo así
conmovedor silencio, sólo roto
por el tráfico grave de los coches,
las sirenas de policía
y las aclamaciones sin consuelo
de las incontables concentraciones ciudadanas
que remontar el dolor ansiaban.
Mientras, el dios de la lluvia lloraba
sobre un Madrid ataviado
con abatidos crespones.

III - Donde Atocha cobija la desdicha

Andaba ajetreado el calendario
ultimando las fechas invernales,
cuando la desdicha progresó
entre las vías de esa estación
que fue del Mediodía
para llegar a ser Atocha,
ahora mudada en estación del dolor
y la aflicción inacabable.

Atocha, puerta abierta
a esos caminos de hierro
repletos de un tráfago
cosmopolita y prolongado;
principio, culminación y diario transcurrir
de asalariados, andariegos y turistas.

Atocha, umbral de viajes andaluces,
de estíos en litorales levantinos,
siempre encuentro de raíles.
Hoy, con Santa Eugenia,
El Pozo y Téllez, es perdurable vía crucis,
calvario que conmemorar inadvertido
con cada acceso venidero
a sus vestíbulos y andenes.

IV- La manifestación propaga el más alto clamor callado

Fue por reunir un mutismo tan punzante,
tan estremecedoramente humano, que se aglutinó
aquella muchedumbre innumerable
haciendo acopio de aceras y calzadas,
de avenidas y plazas, donde las horas
y las almas se dejaron retenidas.

Fue por aunar tanta pesadumbre,
elegías unánimes, reservadas rogativas
y concurrencias fraternales.
Más de dos millones de dolientes,
como caudal que atravesara
una ciudad resistiendo a duras penas,
recubierta de un aroma a cera
desprendido por miles de velas espontáneas
que sus llamas consumían
desde la Almudena hasta Cibeles.  

Fue por convocar todo el pesar y la amargura,
por resucitar la serenidad donde prendían
la turbación y la impotencia.

Bajo una lluvia límpida
fue la quietud inmensa
de un pueblo desgarrado,
que resuelto e inconsolable
fue arrancando el horror de la mirada,
para resolver sin temor y certidumbre
cómo estrenar inéditos amaneceres.

V - El bosque del recuerdo

Un bosque germinado
en ese parque tan nuestro del Retiro,
da razón hoy de secuelas perennes
y admirables enterezas,  
apuntaladas con la amargura
y desolación vertidas
por quienes habitan el recuerdo
y atesoran para un tiempo por llegar 
la solidaridad y la memoria.

Donde esta arbórea espiral se eleva,
ciento noventa y tres olivos y cipreses
hacen cada día mención de sus ausentes,
aquellos, aquellas,
por quienes hoy doblan las palabras.


© Francisco J. Castañón



miércoles, 13 de junio de 2018

Para quienes creen que la patria de todos es la humanidad...

A propósito de las cosas que ocurren hoy muy cerca de nosotros y también en otros lugares del mundo: Puertos y puertas que se cierran, muros que se levantan cada vez más altos, fronteras cruzadas por alambres de espino,...Traigo a colación este poema que escribí hace unos años publicado en mi último poemario Identidad (Ed. Vitruvio, 2016)




Mi patria

'...la patria del alma buena es el mundo entero.'
Demócrito

 

Mi patria es una tierra surcada

por voluntades de concordia

en la que no madura la ira,

donde no acechan escollos amargos

ni los vientos que sostienen la angustia.


Mi patria es una república de gentes cercanas

en la que por fin se extinguió

el fervor de los patriotas encendidos,

para hacer hueco a los que fueron

arrancados de otras patrias.


Mi patria son los caminos que descartan

a esos integrismos empecinados

en desfigurar a los dioses propicios y clementes.


Mi patria son los ríos que cortan el paso

a esos agrios fanatismos que descomponen

a los pueblos de figura y de temple.


Mi patria son los territorios ciertos y absolutos

de la piel de ese alma cotidiana

que mi amada me obsequia sin hipérboles.


Mi patria desterró las fronteras custodiadas

por el recelo y la sospecha,

e hilvanó puentes cordiales

para dar acogida a la palabra abierta

en tránsito constante.


Mi patria son los suelos donde ondean

banderas que no demandan juramentos,

tejidas con hebras de tolerancia

que las canoras aves reúnen con cautela

para ir amueblando el futuro de entereza.


Mi patria es esa región donde el sol hace brotar,

como huellas confiadas, los sinónimos de la justicia

y la nieve resquebraja la simiente de la intransigencia.


Mi patria, amigos, amigas,

es un país aún no inaugurado,

con ínfulas de continente escondido,

en las latitudes de las memorias escépticas

y las utopías conquistables.



(Del poemario 'Identidad', Francisco J. Castañón, Ed. Vitruvio, 2016)





martes, 12 de junio de 2018

‘Mayo del 68. Una utopía tras las barricadas’



‘Mayo del 68. Una utopía tras las barricadas’ (Ediciones Vitruvio, 2018) es el relato de los hechos que acontecieron durante el célebre Mayo del 68 francés. Dos meses que mantuvieron al mundo en vilo y en los que Francia quedó paralizada. El libro cuenta las protestas estudiantiles, las “noches de las barricadas”, la huelga general de casi 10 millones de trabajadores, las ocupaciones de las fábricas, las tentaciones militaristas del general De Gaulle para restablecer el orden, las elecciones que pusieron fin a la crisis,... Nada se deja sin narrar en esta guía para conocer lo que fue Mayo del 68. También fija la mirada en todo lo que rodeó aquella revolución: la liberación sexual, la música, el cine, la moda, las pintadas,…